El hombre está diseñado para moverse, no para pasar 8 o 10 diez horas sentado en el trabajo o frente a un computador. ¿No crees que tantas horas de inactividad deben ser compensadas con algo de movimiento? ¿Te parece excesiva una hora diaria de actividad física cuando te pasas el resto del día sin moverte? Habrás oído y leído innumerables cosas sobre los beneficios del ejercicio. En este artículo los resumimos en diez ventajas. Una sugerencia: imprime esta hoja y tenla a mano para que te acuerdes de lo necesario que es hacer alguna actividad física.
Alivia tu estrés ¿Te duele la cabeza y el estómago? ¿Estás nervioso y no puedes dormir por la noche? Un poco de ejercicio es más eficaz que cualquier medicina contra el estrés y te ayudará a tenerlo siempre bajo control. Hacer ejercicio, mover el cuerpo, sudar y cansarte es la mejor manera de expulsar toda esa mala energía acumulada.
Duermes mejor Nada como un poco de ejercicio cada día para regular el sueño. Si ya tienes problemas de insomnio procura entrenarte por la mañana o a primera hora de la tarde para cansarte lo justo y no activarte demasiado antes de irte a la cama. La calidad del sueño también mejora.
Tu humor es mejor y sonríes más Hacer ejercicio hace que, aunque tú no quieras, segregues endorfinas, una sustancia que levanta el ánimo, proporciona sensación de bienestar y energía, lo que nos hace sentir bien y contentos. No verás a mucha gente salir con cara triste o malhumorada de un gimnasio después de haber entrenado y haberse dado una ducha.
Mejora tu aspecto físico Además de cuidar tu salud, hacer deporte te embellece. Al entrenar se desarrollan las fibras musculares; tu figura se moldea y estiliza, no es necesario ser delgada y curvilínea para conseguir mantener firmes las zonas que antes tienden a envejecer. Tu postura también mejora, con lo que pareces más alta y joven. La ropa te sienta mejor, se te ve buen aspecto, todo está en su sitio...
Mejora tu salud general Por poco que practiques, tu salud se ve inmediatamente recompensada. Hacer ejercicio protege tu corazón, tus arterias, tu mente; mantiene el colesterol a raya, permite controlar enfermedades como la diabetes o el asma, soluciona problemas como el estreñimiento...
Te mantienes más flexible y ágil Además de fuerte y enérgico, haciendo deporte mantienes el cuerpo siempre a punto y conservas tus cualidades físicas intactas durante más tiempo. Para las personas mayores es la mejor forma de mantenerse ágiles. Todo ello repercute en tu vida normal: no te cansas en el trabajo, estás más activo los fines de semana, puedes realizar esfuerzos físicos sin que te cueste demasiado, conduces mejor, puedes correr tras el autobús...
Mejora tu memoria La actividad física es el ‘ángel de la guarda’ de nuestra mente. Activa tus reflejos y mantiene tu cabeza despejada. Hay estudios científicos que demuestran que previene el Alzheimer y ayuda a mejorar y mantener la memoria, lo que es especialmente beneficioso para la gente mayor. Es la mejor forma de desintoxicar la mente después de una larga jornada de trabajo o cuando estamos bloqueados y necesitamos aclarar nuestras ideas.
Previene la descalcificación de los huesos El ejercicio con pesas o una actividad física moderada ayuda a fijar el calcio en los huesos y a desarrollar masa ósea. Es un gran preventivo para la osteoporosis. Esta razón debe ser suficiente para que cualquier mujer se plantee hacer ejercicio: puede evitar las descalcificaciones de la menopausia y muchas roturas de caderas.
Te da un aspecto más joven Hacer ejercicio te quita años de encima. La postura corporal mejora de tal manera que parecemos más jóvenes. También es muy bueno para oxigenar los tejidos y eliminar impurezas, además de beneficiar al buen funcionamiento de los órganos y hacer que tengamos mejor color de piel. Si no, compara a dos personas de la misma edad, una que haga ejercicio y otra que sea sedentaria. ¿Cuál parece más joven?
Te ayuda a adelgazar y a quemar grasas Es una ventaja muy importante, sobre todo si lo que te preocupa es tu aspecto o tienes un problema de sobrepeso. Haciendo ejercicio se queman las grasas sobrantes del cuerpo, sobre todo porque el músculo que se va desarrollando consume mucha energía. Hacer ejercicio de forma regular mantiene siempre activo nuestro metabolismo, aun cuando estamos descansando, lo que quiere decir que siempre estamos quemando calorías.
No hay comentarios:
Publicar un comentario